¿Desarrollo de Software? ¿Qué es eso?

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Tenía 17 años cuando me decidí a estudiar programación. La mayoría de mis amigos y gente del círculo que me rodeaba sabían bien de qué se trataba. Incluso en mi familia hay programadores, por lo que las preguntas eran más sobre dónde iba a estudiar y no sobre de qué se trataba.

A medida que fui creciendo, ese círculo de personas se fue ampliando. Algunas se sorprendieron de mi elección de carrera. “La carrera del futuro”, dijeron. “Tiene una salida laboral muy importante”, expresaron otros. Incluso para mi sorpresa, hubo gente que no tenía noción siquiera de en qué consiste el trabajo de un programador.

“¿Y vos, a qué te dedicás?”

En conversaciones casuales, cumpleaños, reuniones y demás, siempre aparece la típica y clásica pregunta: “Y vos, ¿qué estudiás?”. Generalmente las respuestas siempre son medicina, contabilidad, abogacía; títulos, por así decirlo, clásicos. Pero, al llegar mi turno, la mayoría queda perpleja cuando suelo contestar “¡Desarrollo de software!”. Incluso cuando decido cambiar mi respuesta por “Programación”, el feedback es casi el mismo: dos o tres personas que saben bien lo que implica mi trabajo, tal vez otras dos que tienen una ligera idea; pero el resto (que es generalmente la mayoría) se miran entre ellos y luego responden “¿Y eso qué es? ¿Qué hace un programador?”.

Muchas veces traté de explicar en detalle qué es lo que hacemos. Tras varios intentos fallidos, advertí que tal vez es necesario tener al menos unos pocos conocimientos sobre el tema para poder comprenderlo en su totalidad. Decidí por lo tanto simplificar mi respuesta a “creamos aplicaciones”, un concepto que, gracias a que todo el mundo hoy tiene un smartphone, es un poco más claro para el común de la gente.

De cualquier manera, todas estas situaciones generaron una duda en mí: ¿Por qué las personas suelen no tener ni idea de lo que hace un programador pero, en términos generales, sabe qué es lo que se hace en las otras profesiones?.

Una carrera no tan… ¿Clásica?

Enfrentados a la pregunta anterior, la respuesta usual es que es una carrera relativamente nueva. Lo cual es incorrecto. Obviamente no tiene tantos años de antigüedad como medicina o abogacía, puesto que está extremadamente ligada al avance de la tecnología, pero en la década del 50, ya ingresaban los primeros estudiantes de Ingeniería en Sistemas a la Universidad Tecnológica Nacional, y de esto hace ya casi 70 años. Incluso hay otras carreras, como la Licenciatura en Marketing, que son mucho más nuevas en el país que las que están orientadas a la programación y a la teoría de la computación. Por lo tanto, el tiempo transcurrido, desde que llegaron las carreras de sistemas a la Argentina hasta el día de hoy, es completamente irrelevante.

El miedo a las carreras técnicas

A pesar de que hoy en día cada vez más personas eligen estudiar programación, sigue siendo una especialidad a la que la mayoría no se atreve. Muchas veces escuché opiniones como “Para estudiar programación hace falta ser un genio”. Y no, no podrían estar más errados. No hace falta ser un genio para estudiar programación u otra carrera. Creo que el continuo y enorme avance de la tecnología día a día es lo que asusta. En eso hay algo de razón: el desarrollador de software debe estar preparado para afrontar cambios tecnológicos todo el tiempo. Pero no es nada a lo que cualquier persona no pueda acostumbrarse.

Fui a un colegio con orientación técnica en informática donde también había una división con orientación en electrónica. Entre ambos cursos éramos 26 personas, de las cuales solo 3 seguimos carreras técnicas. La mayoría creían no estar preparados para eso. Pero, ¿qué tan preparado debería estar uno para comenzar una carrera universitaria de un área específica? ¿Es lo mismo prepararse para estudiar una carrera técnica que para estudiar una carrera humanística?

Volviendo a lo manifestado por mis compañeros de división, me ocurre lo contrario. Siento que nunca estaría lista para memorizar absolutamente todos los huesos, músculos, órganos y nervios del cuerpo humano o para memorizar todas las leyes del Código Civil y Comercial. Es por eso que creo profundamente que el concepto de que una carrera específica exige una preparación mayor o menor es incorrecto. Es el individuo el que se inclina hacia una u otra según sus gustos, su percepción de comodidad, su expectativa de una experiencia universitaria más agradable y, sobre todo, si cree que es una profesión que tendrá ganas de ejercer durante toda su vida laboral.

¿Por qué creo que es importante fomentar el Desarrollo de Software?

En mi opinión personal, creo que la gente, al momento de elegir una profesión, no ve el potencial que se esconde detrás del Desarrollo de Software. Posiblemente la reduzcan a una carrera en la que solo se crean algoritmos para automatizar cosas. Pero como me dijo una vez uno de mis mentores en 10 Pines: “la programación es un arte”. Y para mí es eso, el arte de poder crear, modelar y modificar cualquier cosa, desde cero, de manera virtual. Es incluso mucho más flexible que otras artes, solo por el hecho de no ser algo físico. La programación no es solamente eficacia y eficiencia en los algoritmos. Es analizar, pensar, diseñar, debatir, decidir, implementar y, sobre todo, compartir nuestras ideas con los demás. No solamente es el desarrollo de aplicaciones. A través de los sistemas, los desarrolladores aceleramos y automatizamos procesos, ayudamos a la gente, proveemos a las personas una mejor calidad de vida e incluso, a veces, hasta las salvamos. ¡Hacemos del mundo un lugar mejor! O, al menos, un lugar más sencillo para vivir.

Aportemos nuestro granito de arena

Con todo esto, llegué a la conclusión de que las personas que no saben a qué nos dedicamos, no lo ignoran por no ser una carrera interesante o porque sea “nueva”. No están bien informados sobre todas las cosas que se pueden lograr y mejorar a través de la programación.

Creo que es muy importante comunicar a los jóvenes sobre las carreras técnicas y los beneficios que generan en la industria el estudio y el avance de las mismas y así lograr que cada vez más personas se animen a entrar en este mundo, sobre todo, sin tenerle miedo. Nosotros, por nuestra parte, podríamos fomentar los beneficios del desarrollo de software hacia nuestros amigos, familiares y conocidos para poder derribar los mitos y miedos ¡y así lograr que cada vez seamos más en este hermoso mundo!